Hace más de un año, en la madrugada del 25 de octubre de 2023, una catástrofe ambiental golpeó las costas de Acapulco con vientos que superaron los 265 km/h. Lo que inicialmente se creía un ciclón se transformó rápidamente en una tormenta tropical y, en menos de 24 horas, alcanzó la categoría 5 de huracán. El desastre y la pérdida fueron incalculables, dejando a este paraíso tropical irreconocible y devastado.
No solo se destruyó el entorno natural; miles de personas perdieron sus hogares, negocios y la paz que disfrutaban en ese hermoso rincón del país.
Parecía que, después de casi un año, Acapulco comenzaba a mostrar signos de recuperación cuando John, lo que se creía un ciclón tropical, se abrió paso por el Pacífico, alcanzando la suficiente fuerza para convertirse en un huracán de categoría 3. Este fenómeno golpeó las costas de Guerrero y Oaxaca el 23 de septiembre del presente año. Con vientos sostenidos de 195 km/h, John trajo consigo tormentas intensas y fuertes lluvias que provocaron inundaciones repentinas, deslizamientos de tierra, derrumbes y un aumento peligroso en el caudal de los ríos.
John continuó su trayectoria y se debilitó a tormenta tropical a medida que se adentraba en la región montañosa del sur de México. Sin embargo, cambió de rumbo y dio un giro que lo llevó de regreso a las aguas del Pacífico, donde, en cuestión de horas, se fortaleció nuevamente, alcanzando la velocidad suficiente para ser catalogado como un huracán de categoría 1.
Así, en menos de un año, uno de los destinos turísticos más importantes de México recibe por segunda vez un severo golpe, afectando el turismo, la economía y la tranquilidad de toda la población. El caos fue tal que muchos consideran Acapulco una zona de desastre, ya que los daños sufridos han sido tan graves que la infraestructura, los servicios básicos y la vida cotidiana se han visto gravemente afectados.
Según datos de El País, durante cuatro días la estación meteorológica de Acapulco registró el 80% de la cantidad de agua que normalmente se recibe en un año, mientras alrededor de 40,000 hogares se inundaban por las intensas e incesantes lluvias. En algunas zonas, el agua alcanzó profundidades de hasta dos metros y medio. Acapulco quedó cubierto por agua y lodo, y no hubo vivienda que no se viera afectada por el paso del huracán y las fuertes precipitaciones.
Es un hecho que Acapulco aún no se había recuperado de los estragos causados por el huracán Otis cuando John llegó a la costa, devolviendo a sus habitantes a la condición de afectados. Aunque John no alcanzó la magnitud devastadora de Otis, los daños provocados por las incesantes lluvias, las inundaciones, los deslizamientos de tierra y los derrumbes han sido significativos. Las pérdidas humanas y materiales continúan siendo incalculables, dejando a muchas familias en una situación de vulnerabilidad.
A medida que las comunidades intentan reconstruirse, se enfrentan a la difícil tarea de lidiar con los efectos acumulativos de ambos desastres luchando no solo por reconstruir lo que se perdió, sino también por sobrevivir a las nuevas adversidades que John trajo consigo. Muchas de estas personas se ven obligadas a afrontar la falta de recursos, la pérdida de sus fuentes de ingreso y de sus hogares, así como con la escasez de servicios básicos y el acceso limitado a la ayuda humanitaria.
Las imágenes y videos que circulan por internet solo nos permiten imaginar la magnitud del desastre y, de esta manera, entender y solidarizarnos con el pueblo de Acapulco. Organizaciones locales y grupos comunitarios se han movilizado para brindar apoyo; sin embargo, el futuro de Acapulco depende de una respuesta efectiva y coordinada, no solo a nivel local, sino también de la intervención estatal y nacional para proporcionar todo el respaldo posible.
Además, es importante mencionar y comprender que los huracanes son, en gran medida, una consecuencia del cambio climático provocado por la actividad humana, te invitamos a Leer:
Huracán Otis como consecuencia de un grave problema climático
Fuentes consultadas
https://www.facebook.com/bbcnews. (2024, September 27). Huracán John: por qué el ciclón se convirtió en “tormenta zombi” dejando al menos 5 muertos en México – BBC News Mundo. BBC News Mundo. https://www.bbc.com/mundo/articles/cy94xqrgq8zo
Suárez, K. (2024, October 24). Acapulco, entre la devastación y la esperanza un año después del huracán Otis. CNN; CNN en Español. https://cnnespanol.cnn.com/2024/10/24/acapulco-huracan-otis-un-ano-despues-orix/
Anexo estadístico 2022. (2022). Coneval.org.mx. https://www.coneval.org.mx/Medicion/MP/Paginas/AE_pobreza_2022.aspx
de, M. (2024). Los estragos de John convierten a Acapulco otra vez en zona de desastre. Proceso.com.mx; Proceso. https://www.proceso.com.mx/nacional/2024/9/28/los-estragos-de-john-convierten-acapulco-otra-vez-en-zona-de-desastre-337574.html
Guillén, B. (2024, October 21). Acapulco, un año como zona de desastre. El País México. https://elpais.com/mexico/2024-10-21/acapulco-un-ano-como-zona-de-desastre.html
Redacción Quadratín. (2024, October 24). Así viví el huracán Otis (y luego el John). Quadratin Chiapas. https://chiapas.quadratin.com.mx/sucesos/asi-vivi-el-huracan-otis-y-luego-el-john/