Según datos de la ONU, se estima que el 7% de la población mundial —unos 575 millones de personas— podría verse aún atrapada en la pobreza extrema en 2030.
Seguramente has visto documentales sobre esto, sobre el cómo los desechos tóxicos de las empresas, o las enormes cantidades de prendas que se desechan diariamente debido a la “Fast Fashion” llegan a estos poblados de extrema pobreza, donde no solo las condiciones de higiene o salubridad son alarmantes, sino donde también los niveles de desnutrición y enfermedad también son muy altos, sin embargo, esos no son las únicas faltas a los derechos humanos de estas personas.
Es probable que no seamos tan conscientes de la magnitud de la problemática que representa la pobreza para la salud y desarrollo de estas poblaciones, en especial cuando no podemos verla en nuestra cotidianidad o cuando nunca la hemos vivido.
La ONU define a la pobreza como un fenómeno multidimensional que comprende, además, la falta de las capacidades básicas para vivir con dignidad. Las personas que viven en la pobreza experimentan muchas privaciones que se refuerzan mutuamente, impidiéndoles ejercer sus derechos y perpetuando su situación. Algunas de las privaciones más comunes a las que se enfrentan las personas con extrema pobreza son:
- Pésimas condiciones laborales que rayan en lo peligroso.
- Viviendas inseguras
- Falta de alimentos
- Falta de acceso a la justicia
- Falta de poder político
- Falta de acceso a la educación
- Acceso limitado a servicios de salud y/o atención médica
Tan solo en México 55.7 millones de personas se ubican en situación de pobreza y 10.8 millones en pobreza extrema ( Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, 2020).
La falta de acceso a servicios de salud es una de las consecuencias y problemáticas más recurrentes a las que se enfrentan las personas en situaciones de pobreza y pobreza extrema ya que no poseen los recursos necesarios para satisfacer sus necesidades básicas y en definitiva no pueden costear ninguna clase de servicio de salud o tener acceso a medicamentos debido a sus elevados costos. Según datos de la ONGD “Manos Unidas” aproximadamente el 40% de la población mundial no tiene cobertura sanitaria, y el 33% no tiene acceso a medicamentos porque su alto costo no se los permite. Esto no solo reduce la esperanza de vida de estas personas sino que también incrementa considerablemente la tasa de mortalidad.
El CONEVAL realizó las estimaciones de la medición multidimensional de la pobreza. A nivel nacional, entre 2018 y 2020, se observó un aumento de la población con carencia por acceso a los servicios de salud al pasar de 16.2% a 28.2%, lo cual representó un aumento de 20.1 a 35.7 millones de personas en este periodo. Lo anterior significa que en dos años hubo un aumentó de 15.6 millones de personas que reportaron no estar afiliadas, inscritas o tener derecho a recibir servicios de salud en una institución pública o privada.
¿Cómo puedo contribuir a erradicar la pobreza?
Es importante recordar que todos podemos contribuir a erradicar la pobreza y/o ayudar a personas en estas condiciones. Cualquier acción, por más pequeña que sea puede hacer la diferencia en la vida de estas personas.
- Contribuir a organizaciones benéficas.
- Voluntariado.
- Comprar productos de empresas socialmente responsables.
- Apoyar programas educativos.
- No discriminar por estatus sociales y/o económicos y ofrecer salarios dignos a estos grupos de personas.
Apoyar a la causa significa brindar ayuda a toda persona que se encuentre en condición de pobreza o pobreza extrema a recibir el trato digno que se merece como ser humano. Ayudar a atender a la población más vulnerable, combatir las desigualdades y ofrecer acceso al desarrollo, el acceso universal a un trabajo decente y a la protección social como medio para defender la dignidad humana de todas las personas para que puedan tener una vida digna, libre de discriminación o racismo, y para que gocen en plenitud de todos sus derechos.
”La pobreza es una negación de los derechos humanos de cada persona. De hecho, la pobreza es doblemente indignante. No solo conduce a la privación, el hambre y el sufrimiento diarios, sino que además impide el disfrute de los derechos y libertades fundamentales de que todo ser humano debería poder gozar sin obstáculos”.
Kofi Annan (2022)
Secretario de las Naciones Unidas
Fuentes /sitios web consultados